En un contexto donde el bolsillo aprieta y el consumo se retrae, una nueva meca del comercio emerge al sur del Gran Buenos Aires: La Gran Dulce. Este gigantesco centro comercial ubicado en Villa Celina, a metros de Puente La Noria, se convirtió en una alternativa poderosa frente a los históricos mercados populares como La Salada o Flores, gracias a una fórmula que combina precio, seguridad, variedad y comodidad.
Con más de 57.000 metros cuadrados cubiertos y 400 locales en funcionamiento, el predio ofrece desde ropa importada de marcas discontinuadas hasta productos para el hogar, gastronomía y un parque infantil. El espacio apunta a captar tanto al comprador minorista como al revendedor, con locales de dimensiones estándar, estacionamiento gratuito para 15.000 vehículos y una propuesta que apuesta al crecimiento: el 70% del predio aún está reservado para nuevos emprendimientos.
La oferta textil incluye prendas de GAP, H&M, Bershka, Forever 21 y Pepe Jeans, entre otras, con etiquetas de colores que simplifican los precios. Se pueden conseguir remeras desde $2.000, vestidos desde $12.900 y tapados desde $90.000. A diferencia de otros mercados que funcionan con horarios limitados, La Gran Dulce abre todos los días del año, salvo feriados específicos, y suma un atractivo diferencial: micros exclusivos que trasladan compradores desde diversos puntos del AMBA por $5.000, ida y vuelta.
Más allá del consumo, el impacto económico y social ya es visible. La llegada del predio generó empleo local, reactivó el comercio barrial y reposicionó a Villa Celina como un nodo comercial estratégico. En paralelo, se están adecuando 200 metros cuadrados para recibir micros de larga distancia, lo que perfila al lugar como un nuevo epicentro nacional de los “tours de compras” que históricamente visitaban Once o Avellaneda.
Otro punto clave es la seguridad. En contraposición a la fama conflictiva de La Salada, La Gran Dulce garantiza vigilancia, zonas bien iluminadas y pasillos amplios, lo que la transforma en un lugar apto para el paseo familiar. Además, el toque visual de sus dos dinosaurios gigantes en la entrada refuerza su identidad y atractivo.
Fuente: Alerta Digital